Si hay un país proclive a admirar la belleza con los perros ese es Reino Unido, no en vano la misma Isabel II es una declarada amante de los animales y de los canes en particular. Durante más de doscientos años los lebreles son una de las razas favoritas de Gran Bretaña, por la elegancia que desprenden estos perros, además de su excelente forma física que les permite tanto participar en las cacerías de la nobleza como realizar trabajos de pastoreo o caza en entornos naturales.
Sin embargo, no todos los británicos se podían permitir un galgo greyhound o un azawakh, por lo que a principios del siglo XX la variante whippet se popularizó mucho en Gran Bretaña, era más accesible, por lo que se consideró el tipo de galgo más popular, sin embargo los lebreles del tipo whippet nada tienen que envidiar al resto de galgos, ni en su morfología, salud o carácter.
Como el resto de galgos, los whippet son perros muy atléticos, han sido y siguen siendo utilizados para carreras, pudiendo alcanzar los 60 km por hora. Son muy activos, inteligentes y tienen un carácter valiente y templado. Una de las características que más le diferencia es su timidez, que destaca frente al resto de lebreles. Son perros muy amistosos, perfectos para relacionarse con un ambiente familiar cercano, les gusta jugar y siempre se muestran alegres.
En ocasiones hay razas de perro que tenemos muy encasilladas, los galgos o lebreles no solemos tenerlos en cuenta como perros guardianes porque su cometido estrella es correr o cazar pequeños animales como conejos o roedores. Sin embargo, lo cierto es que los whippet son perros muy valientes y tienen muy patente su sentido del deber respecto a proteger a su entorno más cercano de las posibles agresiones de los desconocidos. El whippet suele volcar sus sentidos para identificar posibles situaciones de peligro y así poder entrar en acción para defender a su entorno.
Esto tiene que ver con que es un perro reservado, silencioso y casi tímido, por lo que no accede con facilidad a entablar contacto afectuoso con cualquiera: no se deja convencer fácilmente. Se muestra reservado con aquellos que no conoce, sean personas u otros animales, y sólo cuando tiene suficientes pruebas de que no existe peligro, se mostrará más vivaz y proclive al juego.
Sin embargo, en el entorno más cercano su carácter es 100% dócil, es extremadamente extraño que un whippet se muestre violento en el hogar, es más: se trata de un perro que lleva bien el trato con los niños, lo que constituye una prueba de fuego para el carácter de cualquier can.
Eso sí, os whippet no tendran paciencia ni permitirán que se les trate mal, por lo que si tienes hijos y vas a adoptar un whippet, es muy importante que los niños sean plenamente conscientes de los límites a la hora de tratar con dignidad a un perro, no sólo porque es lo correcto, sino porque en el caso del whippet si existe una agresión contra él puede demostrar su molestia de forma muy contundente: ladrando y defendiendo su espacio personal con advertencias claras.
El pilar de que el whippet tenga un talante extraordinariamente familiar, dócil y juguetón es que sea educado desde cachorro dentro del entorno doméstico. En su caso, la socialización es urgente y marcará completamente su caracter futuro. Si no ha convivido con una familia o con otros animales a una edad ya adulta, es probable que todos los buenos rasgos que de por sí tienen los whippets socializados no se muestren en todo su esplendor.
Es un perro muy inteligente, en el ranking definido por el Doctor Stanley Coren ocupa el puesto 51 de un total de 79, pero además con el adiestramiento es capaz de mejorar aún más los rasgos que le convierten en un perro sagaz, los ejercicios de memoria, de resolución de problemas y de aplicación de soluciones serán los que consigan que los whippet demuestren un aumento significativo de sus facultades intelectuales.
Si adoptas un whippet algo mayor o simplemente si quieres agudizar su inteligencia, ten en cuenta que siempre debes optar por refuerzos de adiestramiento positivos, utiliza premios, gratifícale con tu atención y entusiasmo, y verás cómo en poco tiempo el perro adquiere los hábitos que le inculcas, pues se trata de un tipo de galgo muy sensible y abierto a la socialización, su escucha es muy profunda y querrá involucrarse en los juegos que le propongas, además de participar activamente en la vida familiar.
Por suerte, se trata de un tipo de galgo que no tiene ninguna afección de salud ni dolencia concreta. Su estado puede ser perfecto hasta la vejez. Solo podríamos destacar las enfermedades oculares, que como en el caso de muchos perros, están representadas en los whippets con las famosas cataratas caninas.
Fruto de esta buena salud, figura atlética, su gusto por el ejercicio y no una especial voracidad en su alimentación, son perros que pueden llegar a vivir 15 años, lo que constituye una edad más que respetable teniendo en cuenta que no son perros pequeños. Los machos llegan a una altura de 51 cm y las hembras de 47 cm, con un peso medio de 12 kilos.
