Para los que todavía no lo escucharon nombrar o no saben de qué se trata; el cybermonday o “ciber lunes”, es una estrategia de las empresas estadounidenses para impulsar al público a comprar por internet.
Su auge marketinero fue creciendo con el paso de los años, el término tuvo su debut en 2005. Se trata, principalmente, de realizar los “días después” de días festivos (en EE.UU Acción de Gracias o Navidad, por ejemplo) y ofrece importantísimos descuentos en internet.
El ciberlunes se convirtió en un término de mercadotecnia internacional utilizado por los minoristas en línea en Alemania, Argentina, Canadá, Colombia, España, Perú, Portugal y Reino Unido.
En Argentina en 2012 se realizó el primer ciber lunes oficial, ue despertó la curiosidad de los clientes y generó consultas e interés, aunque la repercusión no fue tal en las ventas. Según comentó Patricia Jebsen, Presidenta de la CACE (Cámara Argentina de Comercio Electrónico), el Ciberlunes argentino de 2013 fue todo un éxito y superó los 198 millones de dólares estadounidenses.
La realidad es que el cybermonday ofrece algunas ventajas, además de la promoción y los descuentos. Principalmente, las marcas lanzan esos productos de los que tienen poco stock o son difíciles de conseguir. Durante el evento, las empresas se esfuerzan por atender al público de la mejor manera.
Como siempre, (y como en todo) están quienes se adaptan a la compra en internet y quienes se resisten. Los inconvenientes pueden ser que el sitio colapse, que pagues y el producto esté sin stock. Pero el dinero nunca se pierde, a lo sumo queda congelado en Mercado Libre o la página que esté actuando de mediadora entre el cliente y la empresa. Por eso es importante estar atentos y cargar los datos de las tarjetas de débito o crédito en sitios confiables.