A veces no tenemos tiempo de humectar nuestra piel y cabello durante el día, o porque luego de una jornada agobiante no ha quedado en el mejor de los estados. Para esos momentos, tenes aún un lapso de al menos ocho horas de reparación de tu piel y pelo, y es mientras dormis.
Medias y loción para pies
Una de las maneras de amanecer con los pies suaves como si recién te hubieras hecho una pedicura, es durmiendo con unas medias de humedad. Antes de acostarte, exfolia tus pies y humectálos. Luego, ponete unas medias de humedad, diseñados especialmente para ser usados en el tratamiento de acondicionamiento de los pies.
Labios humectados
Los labios secos y agrietados no son para nada estéticos. Para solucionar esto, existen tratamientos de hidratación intensa, que bien pueden aplicarse durante la noche. Primero, exfolia los labios, para eliminar la piel muerta.
Ducha, manteca de karité y pijama de seda
El agua tibia o caliente extrae la humedad de la piel. Para reemplazar esto, luego de tu ducha habitual, reemplaza la humedad de tu piel con un rico aceite o loción de manteca de karité. Por último, usa un pijama de seda, para despertar con la piel más suave e hidratada.
Loción facial hidratante
La piel seca es más propensa a las arrugas y el envejecimiento. Por lo tanto, un rostro bien humectado significa juventud duradera. Lava tu cara antes de dormir y aplica una loción con propiedades anti-age, lo notarás en la textura de tu piel.
Tratamiento de cabello durante la noche
Existen tratamientos sencillos para lograr humectar el cabello durante la noche. Uno de ellos es el aceite de oliva o de coco, ya que ambos tienen propiedades saludables increíbles para el cabello.
Funda de almohada de seda
Las fundas de almohada de algodón suelen secar el cabello y tirar de él mientras duermes. Las fundas de seda son mejores para el cabello y la piel en general, ya que producen mejor fricción y contribuyen con la hidratación.
Utiliza un humidificador
El humidificador es una excelente opción para climas secos y fríos de invierno. Cuando hay poca humedad en el aire, el aire y la piel también se secan. Optar por un humidificador frío en lugar de agua caliente es una solución, para evitar las bacterias de crecimiento.