La fruta debe formar parte de una dieta saludable y, como no podía ser de otra forma, también es una excelente aliada si haces deporte. Tal y como nos confirma Mónica Ramos, nutricionista de Metropolitan Sagrada Familia, la fruta es un buen alimento pre entreno que podemos tomar, tanto frescas como deshidratadas (pasas, dátiles, orejones…). “Por su contenido en carbohidratos sencillos, aportarán la dosis de energía rápida que necesitas para arrancar con fuerza tu sesión de entrenamiento, nos detalla, y añade que es importante elegir alimentos que contengan carbohidratos para los deportes que la fuente principal sea el glucógeno, como por ejemplo el running, ciclismo, crossfit, fútbol, esquí, entre otros. “Siempre hay que individualizar la nutrición según las necesidades de cada deporte y estrategias de entreno”, nos cuenta.
El objetivo es, por tanto, conseguir un extra de energía. “Las frutas son ricas en hidratos de carbono que nos aportarán energía para rendir mucho más durante el ejercicio, pues nos mantendrán unos niveles estables de glucemia y no se producirá una depleción de las reservas de glucógeno, comprometiendo el rendimiento en el entreno o competición”, añade la nutricionista Mónica Ramos.
En opinión de Nieves Cuesta, nutricionista de Reto 48, de manera general, la principal propiedad de las frutas es que nos aportaran energía. Otras propiedades que pueden tener las frutas es que aportan vitaminas y minerales que ayudaran al fortalecimiento de la masa muscular, como pueden ser el potasio y el magnesio, que nos ayudan a evitar los calambres o el sodio, que contribuye a la hidratación, entre otros. “La fruta aporta energía rápida, por lo que es la mejor opción siempre que la persona necesite algo para poder entrenar al máximo rendimiento, pero nunca es algo que sea 100% necesario”, nos cuenta.
“Cualquier fruta es buena, antes y después del ejercicio, no hay una fruta específica que sea mejor, todo va a depender siempre de la persona y si tolera o no alimentos antes del entreno”, considera Nieves Cuesta, nutricionista de Reto 48. “Hay frutas más saciantes, como pueden ser la manzana o el plátano, y otras menos saciantes, pero siempre va a depender de si la persona necesita tomar algo antes o no y si puede entrenar con comida en el estómago o no”, añade.
Pero, aun así, Mónica Ramos sí que podemos citar algunas más recomendables. En este sentido, las frutas recomendadas son:
-La pera y la manzana, dos variedades de fruta fáciles de encontrar y que además nos aportarán muchas vitaminas y pectina.
-Frutas rojas como las fresas, las moras, los arándanos, las cerezas, entre otras. Además de tener índices glucémicos bajos, nos aportan altas cantidades de antioxidantes y componentes antiinflamatorios.
-Cítricos como naranja, mandarina o pomelo que, además de ser ricos en vitamina C, tienen propiedades antioxidantes y su refuerzo del sistema inmunológico es de mucha ayuda a la hora de realizar el esfuerzo físico que exige el deporte. El kiwi y las fresas también son frutas ricas en vitamina C.
-El plátano contiene una mezcla de diferentes tipos de carbohidratos interesante para deportes de larga duración, a parte que contiene un elevado contenido en antioxidantes.