La alimentación actual
En la sociedad que vivimos cada vez se dedica menos tiempo a cocinar y a comer. El uso de la comida “fast food” ha provocado que la calidad de la alimentación en los hogares se haya deteriorado, repercutiendo de forma evidente en la salud de niños y adultos.
Sentarse en una mesa equipada con todos los utensilios necesarios para comer (vajilla, cubiertos, vasos, mantel y servilletas), no sólo significa comer adecuadamente, sino también crear una mayor comunicación y relación entre los comensales. Si se pierde esta costumbre y optamos por sentamos con una pizza delante del televisor, bebiendo en lata y comiendo con las manos, nos enfrentamos a un gran problema, no sólo por lo negativo de este tipo de comidas para la salud, sino porque estaremos matando esos momentos de compañía delante de una mesa bien puesta.
La falta de tiempo es la excusa que más se argumenta para evitar cocinar. Lo curioso es que cada vez las cocinas están mejor equipadas, tanto a nivel de electrodomésticos como de menaje, y se cuenta con mayor variedad y calidad de productos tanto nacionales como del resto del mundo creando una diversidad culinaria extraordinaria. El problema es que la gran mayoría piensa que buena cocina significa cocina sofisticada y difícil.
Cocina sana
Sé da este nombre al arte de preparar los alimentos de forma saludable, minimizando los riesgos para la salud que a veces implica la cocina tradicional. Básicamente se ocupa de cómo evitar los excesos de grasas, colesterol y sal, relacionados con las enfermedades cardíacas, arteriosclerosis, obesidad, hipertensión y ciertos tipos de cáncer. Una de sus pautas más importantes es aumentar las proporciones de alimentos de origen vegetal, como cereales, legumbres, frutas y hortalizas. Por supuesto, el mayor logro de la cocina sana es conseguir un incremento de la salud conservando e incluso aumentando los buenos sabores.
Hoy se sabe que algunos métodos de cocina u alimentos son menos convenientes que otros para la salud. En tanto, existen muchos secretos que permiten mejorar la forma de cocinar y prevenir enfermedades. La cocina sana es una de las mejores aliadas en la búsqueda de la longevidad.
Secretos de la cocina sana
• Cocer lo mínimo los alimentos porque así es como más nutritivos resultan.
• Aprovechar al máximo las vitaminas de los vegetales preparando las ensaladas justo antes de servirlas.
• Si se tiene que elegir entre alimentos enlatados o congelados, mejor los congelados.
• Al cocinar verduras hay que utilizar sólo el agua necesaria ya que el exceso de ésta diluye las vitaminas.
• Al recalentar la comida, se ha de consumir antes de que esta se enfríe por que la temperatura tibia favorece la proliferación de los gérmenes.
Se pueden crear platos ricos sin complicarse demasiado y sin necesidad de robar demasiado tiempo a nuestro ocio.
Pautas para una cocina saludable
Sabrosa y sencilla
Extraer el máximo sabor al alimento aprovechándolo en su totalidad sin desvirtuarlo cocinando con ingredientes naturales, frescos y de calidad sin mezclar sabores en exceso.
Sana y ligera
No excederse con las grasas, conservando el máximo posible los nutrientes.
Equilibrada
Realizar una adecuada proporción de los nutrientes que contienen los alimentos procurando comer de todo en su justa medida.
Variada
Intentar alternar diferentes alimentos, de forma que a lo largo del día se coma prácticamente de todo.
Creativa
Conseguir contrastes de color y de sabor. Presentar los platos con gusto y cariño los hará más apetitosos. Poner imaginación, experimentar y arriesgar hace la cocina divertida y sorprendente tanto para el que la crea como para los que la degustan.