Hay muchas opciones distintas y entretenidas, y andar en rollers o patines es una de ellas.
Patinar tiene todos los beneficios de correr, pero con la diferencia de que se trata de un ejercicio de bajo impacto para las articulaciones porque no implica separar los pies del suelo. Esto minimiza posibles lesiones haciendo a este ejercicio más accesible.
Además de que resulta muy divertido y de que es una manera distinta y ecológica de trasladarse de un lugar a otro, como todo ejercicio físico, patinar tiene sus beneficios para el cuerpo y la mente:
Y aunque al patinar se trabajan principalmente las extremidades inferiores, el resto del cuerpo también hace su esfuerzo, porque mientras tanto los abdominales, espinales y músculos de hombros y brazos impulsan, equilibran, balancean y mantienen el cuerpo erguido. Es decir que mientras se tonifican y fortalecen las piernas, muslos y glúteos, también se están tonificando los brazos y la espalda.
Para una ejercitación más integral, esta actividad se puede complementar con un plan de entrenamiento de fuerza y de flexibilidad que ayuda a prevenir lesiones y mejorar la postura. Un ejemplo de ejercicio de flexibilidad es la elongación, que realizada antes y después de patinar, le da mayor elasticidad a los músculos previniendo lesiones y disminuyendo ese dolor típico post ejercicio.
Usando rodilleras, coderas, muñequeras y casco para evitar golpes fuertes, esta actividad puede ser practicada por grandes y chicos y resulta muy beneficiosa para personas con sobrepeso, porque además de que ayuda a quemar calorías, patinar regularmente mejora la resistencia y cuida las articulaciones.